Aguas turbias en los hogares noieses

Cada vez que llueve nos encontrams en Noia con una desagradable sorpresa, la misma porquería que inunda nuestros ríos y nuestra costa se asoma en nuestros hogares a través del grifo.

Aguas turbias con tonalidades que van desde el gris ceniza hasta el marrón chocolate, pasando por varios amarillos o incluso verdes aparecen en nuestros aseos y nuestras cocinas, esto es así desde siempre, unas deficientes y obsoletas instalaciones de suministro de agua «potable» dejan en evidencia la precariedad de nuestra calidad de vida, reflejo de la calidad de nuestros representantes.

En este video extraido de youtube se puede ver un ejemplo de la situación que vivimos en la villa cada vez que caen cuatro gotas.

¿Que pasa en Noia?

Noia cubierta de mierda.

Noia está cubierta de mierda de Norte a Sur y de Este a Oeste, puede parecer malsonante la palabra mierda, pero es la única que hace referencia a lo que cubre nuestro pueblo, nuestra propia mierda, nuestras heces fluyen por ríos y playas sin tratamiento previo, nuestras basuras deambulan por nuestras calles día tras día fruto de vecinos incivilizados y un servicio de limpieza deficiente e incompetente; nuestros escombros lucen lustrosos sobre lo que antaño eran arenales y zonas de baño.

En tan solo un paseo de una hora se puede ver de lo que hablo, comenzando en el Puente de Traba, donde rio arriba y rio abajo del puente los colectores vomitan nuestras heces y nuestros residuos domésticos  con absoluta normalidad, a la vista y sin que ni habitantes de la zona ni responsables del Ayuntamiento hagan nada para remediarlo.

Nuestros excrementos vertiendose en el Río Traba

Nuestros excrementos vertiendose en el Río Traba

Continuamos río abajo y los colectores se repiten hasta llegar al puente de San Lázaro, ahí la imagen es aterradora, los colectores ya son auténticos afluentes de mierda que asquean al transeúnte con un hedor insoportable, si el paseo es en Jueves o en Domingo, además podremos ver como de los puestos del mercado ambulante se van vertiendo a la calle y al río bolsas, papeles y restos sólidos de todo tipo sin que los agentes de la autoridad hagan nada al respecto, si es que hay agentes de la autoridad.

Continuamos ahora en dirección al paseo marítimo, siguen los colectores desde San Lázaro hasta el antiguo astillero  siguen los afluentes de excrementos y sigue el hedor insoportable, hedor a desidia, hedor a incompetencia y hedor a promesa electoral y política barata, paseamos sobre la pasarela de madera, esta está descuidada y sin mantenimiento de ningún tipo, en su día brillaba y daba gusto apoyarse en sus barandillas de madera, hoy da miedo solo de mirarla, pero mas miedo da mirar hacia abajo y ver que realmente la pasarela está trazada sobre miles de toneladas de excrementos sedimentados, escombros y basuras de toda índole.

Vasos y botellas adornando el estuario.

Vasos y botellas adornando el estuario.

Llegamos al final de la pasarela, en ese punto  esta se convierte en una especie de tímido mirador, pero mas de lo mismo, se trata de un mirador perfecto para observar nuestras vergüenzas, nuestras heces y nuestras basuras; caminemos un poco mas y paseemos por los coquetos arenales que vienen a continuación del mirador, ¿Con que nos encontramos? No existen tales arenales una capa de varios palmos de escombros y residuos tapan lo que algún día fueron las perlas de Noia, pequeñas playas que permitían al bañista o a quien solo pretendía tomar unos rallos de sol, disfrutar de unas vistas espectaculares con el trazado de la Ría y de la desembocadura del Tambre como fondo.

Playa-escombrera de Barro.

Playa-escombrera de Barro.

¿Como es posible esto? ¿Cómo es posible que llegue hasta tal punto la decadencia, la despreocupación y la incompetencia en un ayuntamiento?, ¿Como es posible que cualquier hombre o mujer con un poco de voz y de voto en los plenos del Ayuntamiento vean lo que acabo de narrar y no den un puñetazo en la mesa? Pues es posible, desde hace décadas es posible en Noia, Puerto de Compostela y vergüenza de la Ría que lleva su nombre.

¿Que pasa en Noia?